Estas bolitas son una opción muy práctica para mandar de merienda a los chicos o bien presentarles una forma diferente de comer gallo pinto para aquellos “comelones delicados”. Además, esta receta la quise hacer horneada para dar una opción diferente a las empanadas que son fritas.
Preparación de la masa:
- 2 tazas de masa en polvo
- 1 ½ tazas de agua TIBIA
- 1 cucharada de aceite de oliva o mantequilla derretida.
Sofrito para la masa:
- 1 cucharada de aceite de oliva
- 2 cucharadas de cebolla finamente picada,
- 2 cucharadas de chile dulce finamente picado
- 1 diente de ajo finamente picado o 1 cucharadita de ajo en polvo
- 1 cucharadita de: paprika, perejil seco y sal
Nota: La masa se puede condimentar al gusto, recuerde que olores naturales son más nutritivos y contienen menos sal.
Relleno:
- 2 ½ tazas de gallo pinto
Preparación:
- Prepare el sofrito para la masa y aparte
- En una cazuela mediana combine la masa en polvo, el aceite o mantequilla y el agua tibia y revuelva hasta formar una masa uniforme. Si nota que la masa está aún muy seca y quebradiza puede agregar cucharadas de agua tibia una a una hasta obtener una consistencia similar a la plastilina.
- Divida la masa en 12 bolitas iguales.
- Coja cada bolita y con sus dedos haga un hueco en el centro suficientemente grande para rellenar la bolita con 2 cucharadas de gallo pinto
- Con cuidado cierre la bolita y dele un poco de forma de manera que el gallo pinto quede en el interior de la bolita.
- Ponga las bolitas rellenas en una bandeja engrasada con mantequilla derretida y barnice las bolitas con mantequilla también. Apenas para que se doren y evitar que se quiebren.
- Horneé las bolitas por unos 20 minutos a 360° o hasta que doren.
- Estas bolitas también pueden congelarse antes de ser horneadas y descongelar en el momento que se deseen hornear.
- También puede freírlas si lo prefiere.